El resultado del 14N caerá sobre sus espaldas. Gildo lo sabe. También conoce las adversidades que enfrenta: además de los coletazos de la pandemia, la gestión económica del gobierno nacional asfixia al electorado. El PJ podría tener una elección adversa a nivel nacional, algo parecido a las PASO.
Insfrán no quiere que en la noche del domingo 14, cuando el mapa de colores de Argentina se difunda por todos los medios, Formosa se tiña de amarillo. Sería una mancha a su historial de triunfos que alguna vez rondaron el 75% de los sufragios.
PASARON COSAS
En estos tiempos, con casi 26 años en el poder, la realidad nos muestra “una sangría” de votos peronistas del súper lema oficial. Al “voto duro” gildista, que vimos en septiembre se le suman los clásicos aliados convertidos en eternos “juntavotos” (entre ellos, radicales G).
El soberano, en pocos días, expresará en las urnas cuántos serán los sufragios disidentes que migraron de «la pecera» del oficialismo.
El 12 de septiembre no fueron pocos. Gaby Neme cosechó 60 mil de los 300 mil votos emitidos. El gildismo obtuvo 150 mil. La UCR, 90 mil.
La matemática sacudió al partido gobernante. Modificó porcentajes. Fue un inesperado empate técnico.
Y AHORA?
Con el bogadismo asociado al radicalismo y el PRO, todo será incierto. Por ejemplo, saber que caudal electoral lograrán seducir los peronistas Bogado, Neme, Zaragoza, Fabi Rodríguez y Libres del Sur. Ellos forman parte del desprendimiento del oficialismo. Son los «votos en fuga». En otros tiempos sumaban a Insfrán, hoy cruzaron el charco.
Los votos se suman de a uno. Todos valen igual. Cada uno, es una conquista. Que nadie se haga «dueño» de «tantos» votos. Hay muchos ejemplos donde las redes reemplazaron a los dirigentes..
TODOS OPTIMISTAS
Por estas horas, brotan los analistas, politicologos, encuestas y proyecciones salidas del “círculo de autoayuda” que rodea a cada candidato.
“Ni te imaginas como nos recibe la gente!”. Siempre fue así. El formoseño es respetuoso anfitrión de las visitas. Difícilmente rechace un voto, aunque después no lo use.
“El gobierno está tirando plata como nunca”. Siempre fue así. Los actos multitudinarios, distribución de mercaderías a días de las elecciones, ripio para las calles de los barrios, impresiónate cantidad de carteles y visitas casa por casa, siempre se hizo.
“Ojo, Gildo se puso la campaña al hombro”. No es novedad, siempre lo hizo.
“Los radicales llevan los mismos candidatos de siempre; critican todo y salen por TN”. Ocurrió siempre.
“El peronismo no trabajó en las PASO, ahora salió con todo”. Siempre fue así.
Lo único que varía cada dos años, es el humor social. Muchas veces influenciando por la situación económica. Este 2021, no es la excepción de nada.
QUÉ CAMBIÓ?
Primero, la comunicación. Las redes se tornan incontrolables para el estado.
En medio de tantos medios militantes, son muchos los formoseños que le creen más a Facebook (sin importar el autor o la cuenta) que a un medio tradicional.
Fue tanto el impacto de la pandemia, que muchos protagonistas de esa etapa hoy son candidatos: Neme, Carbajal, Bibolini, Lucena, Suizer, Villaggi
Del mismo modo que internet llega a todo el territorio provincial, la señal satelital ingresa a los hogares más alejados con servicio de televisión.
Lo mismo que mira una familia acomodada de Puerto Madero, pueden sintonizar (con un led de menos pulgadas, seguramente) en una humilde vivienda de El Potrillo.
NO SUBESTIMEN A LA GENTE
Los memoriosos recuerdan que en 1999, la sociedad (en las urnas) mandó al archivo a Joga y le dio la bienvenida a Gildo como nuevo “jefe” y líder.
Dos semanas después, eligió al radical Hernández como intendente de la ciudad.
En las redes sociales, muchos encontraron libertad para expresarse sin filtros.
En el 2001, con De La Rúa presidente y los Bocanfor como medio de pago para estatales, las elecciones para senador resultó empate técnico (con diferencia de un poco más de 100 votos a favor del PJ).
En el 2003, Gildo arrasó en las urnas: obtuvo el 72 por ciento de aprobación popular.
Nuevos referentes: Hay un antes y un después de las redes sociales. Milei, por ejemplo, no pegó un solo afiche en Formosa y lo conocen más que a varios candidatos formoseños.
NAVEGAR ENCERRADOS
El gobierno encerró a la gente durante la pandemia, pero la mayoría “viajó” por las redes sociales. Se expresó, comparó, miró archivos, se autoconvocó, se manifestó y sacudió la siesta formoseña el 5 de marzo: la gente salió a las calles con los jóvenes y las madres a la cabeza.
Desde allí, cambió el comportamiento social del electorado. La sociedad pretende ser protagonista real.
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