LECTURAS RELACIONADAS
Mientras que en otros barrios hay anécdotas de que la Policía secuestró pelotas de fútbol, en el barrio Guadalupe fueron más allá y se quedaron con parte de la cancha. La iniciativa trata de poner punto final a los constantes juegos de pelota que organizan en la zona y que implican una aglomeración de personas que no está permitida por el Gobierno de la Provincia.
Los arcos, que son propiedad de la Municipalidad de Formosa, están enterrados en el cemento, por lo que debió haberse cortado las bases de los caños para poder levantarlos.
En las redes sociales, la Policía fue muy criticada por la decisión, y los vecinos fueron más allá, advirtiendo que sin arcos, igual se juntarán a jugar fútbol en el lugar.
Los partidos de fútbol entre particulares va de la mano con las constantes fiestas clandestinas que son intervenidas los fines de semana.
Como están las cosas, hay una sociedad dividida, donde una parte acepta y reclama que se respeten las medidas sanitarias del gobierno, mientras que otra parte desafía abiertamente las restricciones y hace una vida “normal”, pese a que muchas actividades están expresamente prohibidas.
También lea
Encuentran marihuana oculta en camión paraguayo que traía bananas a Argentina