En la Seccional Primera de la Policía provincial, el 25 de septiembre, una mujer de 24 años denunció a un entrenador de gym. Asegura que el hombre, de la misma edad, luego de una sesión de entrenamiento donde «llamativamente no había otros compañeros» el denunciado le realizó -como era habitual- una serie de masajes con un aparato».
Pero «en un momento dado, le dijo que (la chica) estaba muy contracturada en la zona de la espalda». el profesor se colocó cremas en las manos y comenzó a masajearla. Ante esta actitud, la joven se dio vuelta «y de forma sorpresiva su profesor colocó ambas manos debajo de su remera acariciándole los pechos, sintiendo con lo hizo con intenciones sexuales», por ello, se levantó del piso y se retiró del lugar.