La vicepresidente de la Nación, Gabriela Michetti y el ministro del Interior de la Nación, Rogelio Frigerio, encabezan una comitiva que arribó hoy a Formosa para acompañar al senador nacional Luis Naidenoff que ayer sufrió la pérdida de su esposa y su hijo varón, quienes fueron hallados muertos por «inhalación de gas» en la casa del barrio San Francisco de la capital provincial.
A la sala velatoria de la calle Deán Funes 1446, también llegaron para dar los pésames al parlamentario formoseño, los senadores Esteban Bullrrich, Ángel Rozas, José Cano, Mario Fiad, Pamela Verasay, Silvia Elías de Pérez, Silvia del Rosario Giacoppo.
A un par de horas del traslado de los restos de Joaquín Naidenoff y Cinthya Sonaridio también se hicieron presentes los diputados nacionales Aída Ayala, Álvaro González y Waldo Wolff. Entre los asistentes pudo verse a los gobernadores, de Jujuy, Gerardo Morales; de Corrientes, Gustavo Valdéz y de Formosa, Gildo Insfrán.
La sociedad formoseña está consternada por la tragedia de la familia del titular del Interbloque Cambiemos y acompañó a la familia en redes sociales y la sala velatoria antes que los restos se trasladen hasta el cementerio privado Remanso de Paz de la capital norteña.
Los estudios preliminares de la pericias realizadas por personal de Criminalística de la Policía local y Centro de Investigación Forense del Poder Judicial de Formosa (CIF) determinaron «a prima facie» que la causal del fallecimiento de la mujer y el joven fue «por inhalación de gas».
La esposa del senador, que ingresaba a trabajar en el Poder Judicial a las 06.30 horas, bajó por una escalera de su habitación hasta la cocina de la vivienda y al abrir la puerta «se habría sofocado, desmayado y luego falleció axfisiada en cuestión de minutos».
«El gas subió a la planta alta de la casa y afectó a Joaquín», que fue encontrado por la empleada doméstica de la familia sin vida en un pasillo «a pocos pasos de su habitación»; su última conexión con un grupo de whatsapp fue a las 06.50 hs.
Todas las hipótesis apuntan al mal funcionamiento de un calefón «de los que tienen llama piloto» que habría provocado una pérdida de gas.
También notaron «una pérdida de agua caliente en un baño que habría provocado el funcionamiento toda la noche del calefón» explicaron fuentes de la investigación que agregaron: «uno de los tubos de gas de 45 kilos que alimentaba la red interna continuaba congelada por la continua e intensa emisión».
