#SOLICITADA
AGRAVAR LOS IMPUESTOS AL JUEGO OFICIAL NO ES LA SOLUCIÓN
La ASOCIACIÓN DE LOTERÍAS, CASINOS y QUINIELAS ESTATALES DE ARGENTINA (A.L.E.A.) advierte que la implementación del impuesto sobre las máquinas tragamonedas y los medios de captura automatizada de apuestas:
- Afecta directamente a las economías locales, ya que reduce los ingresos que las provincias, Lotería Nacional S.E. y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) obtienen de los juegos de azar a través de los entes reguladores competentes en la materia, en sus jurisdicciones respectivas.
Disminuyendo, en consecuencia, los fondos que se destinan a asistencia social en cada una de las provincias, en territorio nacional y en CABA.- Favorece el crecimiento del juego ilegal/clandestino, al elevar la presión impositiva sobre el sector regulado y controlado que, en contraposición al ilegal/desregulado que no posee carga impositiva, empleo en negro, aprovecha vacíos legales vigentes en muchas jurisdicciones para comercializar juego por internet y telefonía móvil).
- El citado impuesto no resulta útil para el cumplimiento del fin propuesto de compensar con los ingresos derivados del mismo la disminución de fondos afectada por las modificaciones propuestas al régimen de ganancias. Porque producirá una disminución o achique de la actividad con el ajuste de los operadores y, el consecuente traspaso de los jugadores al circuito ilegal.
- Atenta contra las fuentes de trabajo de las 240.000 personas que, directa e indirectamente, trabajan en esta industria, de las cuales 150.000 pertenecen al sector Salas de Juego y 65.000 al de las Agencias Oficiales.
- Los actores privados del sector, desde las Agencias Oficiales hasta los Concesionarios de Salas de Juegos y Casinos, efectúan el pago de los tributos, aportes y contribuciones establecidas por las respectivas leyes nacionales, provinciales y municipales, incrementando aún más los aportes que, en suma, provee el juego oficial al Estado argentino.
- En Argentina, el juego está regulado por el Estado desde 1893, con una carga impositiva muy importante, que es el modelo a seguir por muchos países de Latinoamérica y el mundo.
En suma, ALEA advierte que el agravar los impuestos existentes traerá un resultado inverso al fin deseado y que se favorece con ello la proliferación del juego clandestino.
Las utilidades del juego oficial que efectivamente administran los 24 entes reguladores en cada una de las jurisdicciones del país, son destinadas en forma directa por cada instituto de lotería y casinos a los ministerios y áreas que, por ley y en cada jurisdicción, deben ser coparticipados. Independientemente de las acciones sociales que también, en forma directa, desarrollan cada uno de los organismos reguladores de los juegos de azar y que son difundidas por los respectivos entes siendo de público conocimiento.
ALEA es una asociación civil sin fines de lucro que nuclea a las 24 entidades estatales que regulan, fiscalizan y administran los juegos de azar en Argentina. Desde 2009 elabora un Mapa de Juego Nacional que permite analizar variables sobre la base de información nacional. Son esos datos los que nos permiten advertir que este nuevo impuesto no es la solución sino que por el contrario, traerá nuevas dificultades a cada una de las jurisdicciones que integran nuestro país.
