Lo confirmaron desde la Municipalidad de Córdoba. Mañana se vence el plazo del último convenio. Aseguran que no habrá ninguna prórroga.
Por Redacción LAVOZ del Interior
En la Municipalidad de Córdoba aguardan que la empresa Dioxitek presente en estas horas una nota en la que comunica el cese de actividades en la planta de elaboración de uranio de Alta Córdoba. De todos modos, con o sin nota, el municipio clausurará la planta el lunes, tal como lo indica el plazo de la última prórroga para su funcionamiento, que vence mañana.
Así lo confirmó a La Voz el secretario de Control, Fiscalización y Convivencia Ciudadana, José Fernández, quien aseguró que se trata de una medida definitiva. Y señaló que esta determinación no se relaciona con la explosión del depósito ocurrida ayer, a cuatro cuadras de la planta de Rodríguez Peña al 3200.Fernández recordó que hace 45 días se realizó el último control por parte de Higiene y Seguridad, sin que se encontraran irregularidades. Pero dijo que esta vez sí se cumplirá con la clausura definitiva.
Más tarde, el propio intendente señaló en una conferencia de prensa: «Cuando asumimos, llevamos adelante la intención de clausurar Dioxitek. La clausuramos durante dos meses. Luego se produjo un acuerdo con el Gobierno nacional. Nosotros acordamos un tiempo prudente para que se pueda llevar acabo el traslado», dijo Ramón Mestre. Y agregó: «Se les dio una prórroga de seis meses, con lo cual esta planta mañana tiene su vencimiento. Intimamos hace 45 días a la empresa para que nos manifieste de forma clara el tiempo y los procesos».
El 99 por ciento de Dioxitek es propiedad de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y el uno por ciento, de la Provincia de Mendoza. En la planta se elabora dióxido de uranio, una materia prima que se utiliza para la elaboración del combustible de las centrales nucleares del país.
En noviembre de 2012 el municipio había firmado un convenio con la CNEA y Dioxitek por el que la planta debía trasladarse en 18 meses, con posibilidad de seis meses de prórroga. El acuerdo implica el saneamiento del predio en el que se encuentran enterradas 57.600 toneladas de colas de uranio.
El 29 de septiembre de 2012 se había clausurado la planta por violar la ordenanza 8.133 de uso de suelo.
