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La comunidad debe saber que la universidad tiene tres funciones básicas: la docencia, la investigación y la extensión, pero para que esto funcione, necesita del apoyo administrativo que se lo da, en este caso, el personal no docente.
Si bien podemos estar de acuerdo que en los últimos tiempos ha ingresado a la Institución un alto número de personal (docente y no docente), respondiendo esto al crecimiento de la Universidad, y que esto ha impactado en el esquema económico financiero de la misma, pero que esto parezca una estafa, entendemos que no le da derecho a nadie atacarnos diariamente.
Porque el ataque es directo y lo más grave y doloroso; personalizadamente a los no docentes, sin tener en cuenta que, justamente los sueldos que cobramos se deben- en la mayoría de los casos- a los de mayor responsabilidad y en general los que cuentan mayor antigüedad.
Se nos menciona cada día con nombre y apellido con sueldos que no cobramos y refiriéndolos como si fuera un delito el que hayamos podido acceder a estos haberes.
Por otra parte queremos decir que el rectorado no acuerda ni fija el sueldo de docentes, ni de los No Docentes, ni su propio sueldo.
Estos son fijados por el gobierno nacional a través de las paritarias y conseguidas con luchas sindicales salariales justas. Sepan también, que por estar ganando lo que ganamos, pagamos impuestos, amén del que nos hace pagar, tratándonos o destratándonos como lo hacen.
No entendemos ¿Por qué atacar gratuitamente al personal, solo por estar en desacuerdo con los funcionarios de turno?.
Pensamos, será porque responden a intereses de poderes propios de un puñado de docentes que dicen ser representantes docentes, pero en la realidad no lo son, quieren hacer responsables a otros de sus propios errores, y de los que hablamos no entraron ayer.
Un profesor que fue funcionario normalizador más de cinco años, consejero directivo de una facultad más de diez años hasta la actualidad, candidato a vicerrector, intento frustrado que solo él sabrá y tendría que decirlo por que desistió del cargo?.
Promesas que no se cumplieron y lógico su enojo, lástima que solo la institución es la que soporta estos ataques infundados.
Los representantes de los docentes en épocas de vacas gordas, nadie protestaba, cuando crecieron en trescientos veinte cargos docentes, sin financiamiento, no decimos que no corresponde y merecidos son esos cargos, pero quienes los representan no movieron un dedo por buscar soluciones ante las autoridades nacionales, ni la deuda docente, ni el financiamiento de esos cargos.
Pero es fácil decir los trabajadores son los responsables de que estemos desfinanciados, subir a un atril y castigar a los que honradamente lograron conquistas gremiales, y que a pesar de muchos seguiremos haciendo con más fuerzas y convicción porque estamos orgullosos de ser no docentes y dejamos en claro que no bajaremos los brazos, acá ni nunca, no se negocia nada, si no es con la totalidad de los quinientos diecinueve no docentes.
Lamentablemente no sabemos por quienes están fogoneados y con qué intenciones lo hacen, lo que sí sabemos es que toda esta situación suma el descredito del personal y de la propia Institución, porque esto solo nos hace enfrentarnos inútilmente y solo para sacar no sabemos qué rédito, o es quizás para desviar el foco que inicio todo este incendio, que es el tema de la deuda ante la AFIP, del impuesto a las ganancias, que en el caso de los docentes, se genero en gran medida porque asesoraron a los docentes que no declaren los sueldos que tienen en otros organismos del estado.
Tomas Eloy Martínez, en su “Decálogo del Periodista”, dice algo muy interesante con relación al desarrollo de la función del periodista: “Hay que evitar el riesgo de servir como vehículo de los intereses de grupos públicos o privados. Un periodista que publica todos los boletines de prensa que le dan, sin verificarlos debería cambiar de profesión y dedicarse a ser mensajero».
Personal No Docente de la Universidad Nacional de Formosa.
Jorge Insfrán – Consiliario
Aníbal Godoy – Consejero
Antonio Villalba – Consejero