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Mucho se habló sobre el tema de la inauguración del nuevo Palacio Judicial, como era de esperar, se televisó en vivo por la red de medios, el Dr. Gutnisky le dedicó una importante parte de su programa “Las provincias también existen” y un nuevo programa de televisión emitido por Lapacho Canal 11 “TV Educa Formosa” o algo así, también le dedicó un espacio relevante dentro de su formato.
Como corresponde a un acto de esta envergadura, en el momento crucial y unos días antes también, todos estaban presentes: políticos varios, los constructores de la obra, medios gráficos, radiales y televisivos, fotógrafos, abogados, funcionarios, jueces en actividad y jubilados, etc. etc. etc.
Hasta acá, todo está perfecto ya que realmente la dimensión de la obra lo amerita, pero hay un detalle que evidentemente a la mayoría de los asistentes se les pasó por alto y los que sí se dieron cuenta, evidentemente prefirieron no decir nada.
Porque alguien tuvo que darse cuenta aunque no exista ningún comentario al respecto.
El tema en cuestión es que el nombre de la biblioteca jurídica ubicada dentro del edificio, lleva por nombre Dalmacio de Vélez Sarsfield tal cual puede leerse en el cartel ubicado sobre la puerta de acceso a la misma y en todas las referencias y señalizaciones que posee el edificio en sus distintos sectores.
Ahora, cabe preguntarnos en honor a quien esta biblioteca lleva ese nombre ya que, por el lado intuitivo podríamos asociar que el honor le corresponde a Dalmacio Vélez Sarsfield (ojo, sin el DE) abogado y político argentino a quien el Estado de Buenos Aires le encargó la tarea de redactar un código de comercio, el cual fue realizado en colaboración con el prestigioso jurisconsulto uruguayo Eduardo Acevedo, terminado en 10 meses, y sancionado en 1859.
El mismo al que después de la reunificación nacional en 1862 se le encargó también la redacción del Código Civil la cual le demandó casi cinco años de trabajo y fue aprobado a libro cerrado en 1869, entrando en vigencia el 1º de enero de 1871.
Pero, al encontrar este agregado DE en el apellido, también podemos suponer que el honor también pudo ser en realidad para un tal Dalmacio que forma o formaba parte del club de fútbol Vélez Sarsfield, recordando que la fundación de este club tuvo lugar el 1 de enero de 1910, en el barrio de Floresta con el nombre de Club Atlético Argentinos de Vélez Sarsfield (con el DE), cuyo nombre deriva de la estación «Vélez Sarsfield» ( sin el DE) del Ferrocarril del Oeste, hoy estación Floresta en el oeste de la Ciudad de Buenos Aires.
Debemos suponer que esta segunda alternativa es falsa o poco probable y por lo tanto, asumimos que el nombre de la biblioteca fue impuesto en honor al abogado cordobés, por lo que en el nombre, sobra el “de”.
Es evidente que una vez más alguien se equivocó pero nadie se atreve a decir nada, teniendo en cuenta que encontrar al responsable es bastante difícil y nadie va a decir “Fui yo”, por eso nos preguntamos: ¿De quién fue el error? ¿Del que decidió ponerle ese nombre pero no tenía ni idea de cómo se escribía, o peor aún, ni idea de quien fue Dalmacio Vélez Sarsfield? ¿Del diseñador gráfico que lo escribió mal (esto no es un error de imprenta) porque tampoco tenía idea de cómo se escribía y probablemente ni siquiera le interesaba? ¿Del que recibió, pagó y debía corregir el trabajo y que tampoco tenía idea de nada relacionado con este nombre?.
En fin, preguntas sin respuestas y errores inadmisibles que se suman a otros similares como carteles de obras oficiales con el escudo de la provincia de Formosa al que le falta un departamento (tiene ocho estrellas nada más) o el mismo logo, impreso en la cola de pegar entregadas desde el Estado a los alumnos como ayuda escolar en el que, para compensar, se le imprimieron once estrellas o departamentos en lugar de nueve…
Esperamos que este error se corrija y se coloque el nombre que corresponde y no que perdure por los siglos de los siglos bajo el dicho “¡No digan nada ehh… total, la gente que sabe!”.
Fuente:
http://formologica.blogspot.com/2010/03/dalmacio-era-de-velez-sarsfield_31.html