Efectivos de la Sección Robos y Hurtos del Departamento Informaciones Policiales, recuperaron dos motocicletas en distintos barrios de la ciudad; mientras que integrantes de la Unidad Especial de Asuntos Rurales (UEAR) Portón Negro, secuestraron otro rodado conducido por un adolescente.
En la noche del sábado último, una mujer de 56 años denunció el robo de una Corven Energy en el barrio Vial de la capital provincial.
Por el hecho, se inició una causa judicial con intervención del Juzgado de Instrucción y Correccional N° 5, de la Primera Circunscripción Judicial de la provincia de Formosa.
Ante tal situación, los investigadores de la Sección Robos y Hurtos desplegaron un exhaustivo trabajo de campo y detectaron posibles lugares donde podría encontrarse el rodado.
Como resultado de la pesquisa, en pocas horas, hallaron una motocicleta con similares características al mando de un hombre y verificaron los números de motor y chasis, con la base de datos de la Dirección General Informática, trabajo que permitió confirmar que se trataba de la moto que estaban buscando.
El segundo procedimiento se produjo el domingo último, en el barrio Urbanización España, donde los policías localizaron una Motomel Blitz 110, oculta entre la maleza de un descampado.
Tras verificar los números de motor y cuadro del rodado, se constató que el rodado tenía pedido de secuestro vigente, en el marco de una causa judicial por los delitos de “Amenaza y Robo en contexto de Violencia de Género”, con intervención de la Justicia provincial.
La última intervención tuvo lugar en la mañana del domingo último, cuando efectivos de la Unidad Especial de Asuntos Rurales (UEAR), Portón Negro, detectaron que un adolescente de 15 años, se movilizaba sobre la Ruta Nacional N° 86 en una motocicleta sustraída, que después fue trasladada hasta la dependencia policial.
Al ser identificado, el menor comentó que no tenía las documentaciones del rodado; minutos después llegó su madre, se le notificó su situación legal y se le entregó al joven en carácter de guarda tutelar.
En todos los casos, las motos fueron trasladadas a las dependencias policiales, donde se notificó al detenido su situación legal y terminó alojado en una celda, a disposición de la Justicia provincial.
