Los vecinos del barrio Bernardino Rivadavia ven cómo cada fin de semana a la madrugada se descontrola todo en las calles de la zona. Es que a la salida de boliches y fiestas los jóvenes quieren seguir “de gira” y van a esa parte de la ciudad capital para el “after” que incluye alcohol, desmanes, peleas, y un sinfín de inconvenientes para los habitantes del barrio.
Cansados de la situación, enviaron una nota al jefe de la Policía de Formosa, Comisario Walter Arroyo, a quien le pidieron controles de alcotest en una esquina puntual de acceso al barrio, y presencia policiales durante toda la noche los fines de semana.
“Los abajo firmantes, vecinos del barrio Bernardino Rivadavia nos dirigimos a Ud. a fin de solicitarle quiera tener a bien considerar la posibilidad de designar personal control de alcotest y otras sustancias, los viernes, sábados y domingos en la intersección de la avenida Napoleón Uriburu y la calle Entre Ríos por la noche hasta la madrugada, a fin de evitar desmanes y accidentes, tanto en el interior del barrio como así también en la costa del río en los denominados ‘after’ que se prolongan de las madrugadas hasta el amanecer y más” se quejaron los vecinos.
“A nuestro querido barrio cada día más lindo, por sus atractivos naturales (río, isla, laguna, senderos, paseo por la barrera, flora, fauna, etc. y el cuidado vecinal) complementado por los servicios de pavimento y otros servicios se les agrega espacios nocturnos de esparcimiento, cuyos asistentes deberían ser prevenidos sobre las sanciones a los que están expuestos en caso de incumplir con la ley en este sentido” apuntaron en su nota.
