Un hombre imputado de abusar de los hijos de su pareja, va a juicio oral y público

El juez de instrucción que investigó el caso, se dirigió con un lenguaje claro y adaptado a las edades de las víctimas. La iniciativa, está en consonancia con la política más reciente del STJ que propicia el lenguaje claro, y que incluso dictó una guía para magistrados, funcionarios y empleados.

Un hombre de 23 años acusado de haber atacado sexualmente a los hijos de su pareja, una nena de 8 años y un nene de 9, será juzgado en los tribunales de Formosa una vez que finalice la feria judicial que comienza este miércoles y se reanuden las actividades normales en el Poder Judicial provincial.

Se trata del caso que tomó estado público hace tres meses cuando se conoció la carta que el juez que investigó el hecho, Guillermo Caballero, envió a las víctimas del abuso, explicándoles con lenguaje sencillo y adaptado a sus edades la decisión que había tomado respecto al imputado, a quien en ese momento decidió dictarle el procesamiento con prisión preventiva.

Durante este tiempo el trámite del expediente siguió su curso hasta la finalización de la etapa de instrucción. Por eso el juez cerró la investigación y hace pocas horas elevó la causa para que el acusado sea juzgado en una audiencia oral y pública por un Tribunal de segunda instancia.

Guillermo Caballero, juez de Instrucción y Correccional N° 6

Tal como lo hizo en aquella oportunidad, el juez Caballero volvió a enviar otra carta a los hermanitos, contándoles las novedades del expediente y que su padrastro iba a tener un juicio.

“Hola L. y V., nuevamente soy Guillermo Caballero, el juez, y esta vez les quiero contar que de ahora en adelante F. va a tener un juicio, donde tres jueces van a decidir sobre lo que les hizo y un fiscal va a defender los Derechos de vos y tu hermanita. Les recuerdo que siempre estaremos para cuidarlos y protegerlos”, dice la nota que el magistrado remitió a las víctimas, y agrega: “Mientras llegue el juicio, F. va a seguir detenido más tiempo, así vos y tu hermana van a tener una Navidad más linda y unas mejores vacaciones, jugando y divirtiéndose con sus amiguitos y familiares; también les pido que sigan escuchando las charlas de las psicólogas que los han apoyado”.

La carta finaliza diciendo: “Hoy que es 21 de diciembre de 2.021, quiero volver a darte las gracias por haber creído en mí y contarme todo. Que el niñito Jesús, los colme con sus bendiciones, feliz navidad”.

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En el expediente se explica que los hechos de abuso habrían ocurrido en numerosas ocasiones, se estima más de 40 veces, y pese a que los chicos le contaron a su madre lo que estaba pasando, la mujer descreyó de sus dichos y siguió confiando en su pareja.

La situación llegó a tal extremo que el varón, cansado de los padecimientos a manos de su padrastro, fue a vivir con su tía, quien tramitó ante la Justicia la tenencia del chico, describe el expediente.

El caso llegó a la Justicia por la denuncia que hizo una de las hermanas de la madre de las víctimas, iniciándose una investigación que a lo largo del proceso encontró una serie de pruebas que sindican al padrastro de los chicos como presunto autor de estos hechos, sobre todo lo que declararon las víctimas en Cámara Gesell, puntualmente el varón, quien hizo un relato pormenorizado de cómo su padrastro abusaba de ellos por la fuerza, bajo amenaza e inclusive, mediando violencia física en más de una oportunidad.

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Otro caso de abuso

Al mismo juez Caballero le tocó investigar otro caso de abuso sexual, esta vez en perjuicio de una adolescente que habría sido atacada por la pareja de su madre. Según la denuncia la menor venía siendo víctima de estos hechos desde hacía tres años dentro de la casa donde vivía con los demás integrantes del grupo familiar, en el barrio Parque Urbano de esta capital y luego en el barrio Luján cuando se mudaron a otra vivienda.

El hombre obligó a la menor a tener relaciones sexuales en numerosas ocasiones cuando su madre iba a trabajar, sometiéndola con violencia cuando intentaba resistirse o gritar para pedir ayuda.

Luego de analizar las pruebas obtenidas durante la investigación, el juez resolvió dictar el procesamiento con prisión preventiva al acusado, por el delito de abuso sexual con acceso carnal, doblemente agravado por el vínculo y por haber cometido contra una menor de 18 años aprovechando la convivencia preexistente, en concurso ideal con promoción de la corrupción de menores agravada y amenazas.

Como lo hiciera en el caso anterior, el juez Caballero envió una nota a la víctima diciéndole lo que había resuelto en la causa. Usando un lenguaje simple agradeció a la víctima por la confianza demostrada y le contó que su padrastro iba a seguir detenido por un tiempo más “para que ya no vuelva a lastimarte a vos ni a nadie más”, dice la carta del magistrado.

El juez

El juez Caballero contó “que muchas veces desde la Justicia escribimos para el sector de los abogados, por eso me pareció escribirles y explicarles (a las víctimas) lo más sencillo posible, esto es algo que nos marca toda la vida”.

Consideró “una buena oportunidad por lo que se viene trabajando desde el Poder Judicial con respecto al lenguaje claro en las sentencias” y destacó “la valentía de una de las víctimas al hablar por la Cámara Gesell”.

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