El nuevo servicio pretende convertirse en una opción válida para los usuarios que deseen moverse desde un lugar a otro de la ciudad capital. Se regirá por horarios pre-establecidos y una cabecera o punto de partida y un lugar físico de llegada, sin paradas en el medio, como tiene el servicio prestado por los colectivos urbanos.
El servicio será licitado, es decir, habrá una convocatoria a empresas que deseen presentarse a competir por la prestación del servicio, por medio de una concesión municipal.
Se tratará de un servicio especial y diferenciado, y habrá horarios puntuales de prestación del servicio para la mañana, mediodía, tarde y noche.
En principio, el tipo de vehículos sería el de tipo minibús, o traffic, que es muy utilizada para prestar servicios interurbanos puerta a puerta actualmente, desde una localidad a otra.
Pero no habrá limitación en el tipo de vehículo. Esto quiere decir que la propia empresa de transporte urbano de pasajeros Crucero del Sur, si se interesa en el servicio, podrá competir en la concesión y eventualmente prestar el servicio pero con ómnibus urbanos.
Las empresas que eventualmente se interesen en prestar el servicio, deberán armar una oferta, y éstas serán analizadas para luego concesionar el servicio a una empresa ganadora, que suele ser la que tiene la mejor oferta armada sobre costos, equipamiento, tarifas, etc.
Escándalo
En la sesión ordinaria no faltó el habitual enfrentamiento entre oficialismo y oposición. Esta vez, la la edil radical Celeste Ruiz Díaz, se mostró muy enojada en el recinto ya que no le habrían permitido la permanencia en el lugar por una “falta” en el ámbito sanitario.
No hay mayores precisiones a esta altura sobre qué falta pudo haber cometido la concejal, ya que desde el oficialismo sólo se limitaron a decir que “se negó a respetar las normas sanitarias implementadas por la presidencia del cuerpo”.
Por esta “inobservancia” no especificada, la concejal fue invitada a retirarse, lo que la enojó de sobremanera.
Ruiz Díaz siempre estuvo a favor de las sesiones presenciales con protocolos sanitarios en el HCD capitalino, por lo que es difícil imaginar qué pudo haber ocurrido en el marco del protocolo sanitario que generó que sea “invitada a retirarse”.
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