La extrema bajante que experimenta el río Pilcomayo, principalmente en la zona de Clorinda, está poniendo en grave riesgo a la salud pública al intensificarse el paso de contrabando y personas por pasos clandestinos desde el Paraguay hacia nuestro país, facilitado por el hilo de agua que sirve como límite internacional.
La actividad diaria del contrabando en el barrio 25 de Mayo de Clorinda, que va desde ladrillos hasta personas, desde la vecina orilla, ingresan ilegalmente por pasos no habilitados, todos los dias y sin pausa, poniendo en un mayor riesgo a la ya delicada situación sanitaria provincial por el coronavirus.
Mientras el Gobierno de la Provincia, los municipios, fuerzas federales y provinciales, hacen tremendos esfuezos para contener el contagio del Covid-19 con rigurosos protocolos y un vigilado ingreso administrado a la provincia, por este lugar ingresan violando todos los protocolos y normas sanitarias que se puedan imaginar.
LADRILLOS DE CONTRABANDO
El contrabando desde y hacia el Paraguay siempre ocurrió en mayor o menor medida en Clorinda, pero ahora, con la pandemia como contexto, la situación es muy grave.
Hay camiones argentinos que llegan hasta el borde del hilo de agua del Pilcomayo, y cargan ladrillos paraguayos que son embarcados en pequeñas canoas hasta el lado argentino.
Este tipo de actividad ilícita perjudicó hasta la extinción a los ladrilleros de Clorinda, y también a los que traen en forma lícita y por un lugar habilitado (Aduana) ese tipo de ladrillos.
Estas empresas no pueden aguantar la competencia desleal de los contrabandistas, porque ellos no pagan ningún impuesto al ingresar ilegalmente.
En su afán de tratar de evadir los impuestos aduaneros, los contrabandistas de ladrillos pierden mucho de su producto, ya que el fondo irregular del lecho del río hace muchas veces que los camiones se balanceen y pierdan su carga. De hecho, a simple vista se aprecia el fondo del río tapizado por trozos de ladrillos rotos.
Según pobladores cercanos, el río habitualmente en esta época del año tiene más agua, pero ahora está extremadamente bajo. Sin embargo, con agua baja o alta, el contrabando es todo el año.
Este lugar es el mismo donde hace algunos días quiso pasar desde Paraguay un tractor y quedó empantanado. Lo abandonaron ahí. Tras ello hubo un procedimiento para extraerlo del cauce.
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