Una comerciante avícola del barrio Bernardino Rivadavia denunció al 991 que «misteriosamente» se le perdió un celular Iphone y que, al rastrearlo por una aplicación «le marcaba que estaba en la calle Avenida Frondizi y Entre Ríos del Barrio Lote».
La mujer recordó a los uniformados «durante la manaña» en esa esquina fue interceptada por un control policial donde se detuvo con su motocicleta. También contó que «una mujer policía» le dijo que tenía que usar barbijo «aunque circule en moto».
Allí mantuvieron una conversación, se bajó del rodado y siguió su camino. Al llegar a destino comprobó que no tenía su teléfono celular.
Rápidamente los policías fueron hasta el citado lugar; pero la sospechosa «ya no estaba, había sido reemplazada por otro turno».
De todos modos, en la continuidad de la investigación se comprobó que el aparato fue sustraído «por una oficial inspector, con prestación de servicio en el Departamento Personal» de la fuerza provincial.
Ante esta circunstancia, la oficial fue detenida y trasladada a la Alcaidia de Mujeres. Se constató que «había guardado el celular entre sus prendas de vestir» y luego lo llevó a su casa «cuando hubo relevo de personal».