De la psicosis del coronavirus, a la acción contra el dengue

Desde hace un par de semanas, los formoseños nos convertimos en especialistas en coronavirus, entendidos en sus causas, efectos, origen, síntomas, et, etc. Es real que el virus que ataca al mundo y hace tambalear potentes economías y obliga a las líneas aéreas a aceptar cambios de fechas de viajes a destinos turísticos importantes. Tan real como y expansivo como la psicosis creada en nuestra sociedad.

Nos enteramos de un alumno de un colegio primario que viajó con su familia a Italia y rápido lo aislamos y hacemos correr la bola: “parece que tiene coronavirus”. En los grupos de whatsapp, a la hora es “confirmado”; aunque nada esté probado y certificado.

Es correcta la idea de tomar prevenciones, pero hay que ser cuidadosos. Más efectivo que alarmar en las redes es lavarse las manos después de toser o estornudar, así como después de tocarse las naríz o la boca.

Pero, estamos en Formosa, La Hermosa. Si miramos a nuestro alrededor podemos encontrar cubiertas abandonadas, cacharros tirados en el fondo del patio, pastizales en el baldío del vecino, pero nosotros estamos preocupados por la terrible epidemia que afecta a Europa!!!.

Situación que también preocupa a quienes regresaron de sus vacaciones en el viejo continente. Pero, si a usted solo le alcanzó solo para ir a Herradura, el Camping de El Colorado o el Parque Acuático del C5, preocúpese del dengue!!!!

Los coronavirus son una familia de virus que se descubrió en la década de los 60 pero cuyo origen es todavía desconocido. Sus diferentes tipos provocan distintas enfermedades, desde un resfriado hasta un síndrome respiratorio grave, una forma grave de neumonía.

Gran parte de los coronavirus no son peligrosos y se pueden tratar de forma eficaz. De hecho, la mayoría de las personas contraen en algún momento de su vida un coronavirus, generalmente durante su infancia. Aunque son más frecuentes en otoño o invierno, se pueden adquirir en cualquier época del año.

Pero, volvamos a Formosa. El dengue convive con nosotros. Luchemos contra el mosquito Aedes aegypti, el principal vector de los virus que causan el dengue.

 

El aedes aegypti se cría en recipientes naturales (huecos de árboles, axilas de las hojas y espacios entre las piedras), y artificiales (tanques de agua, barriles, neumáticos viejos, latas, botellas de plástico o de vidrio con agua, floreros, bebederos de animales y las canaletas de los techos), entre los más comunes.

Convive íntimamente con el hombre y las familias. Entre sus señas particulares se puede destacar que son blancos y negros, con rayas en el dorso y en la espalda; y pican especialmente durante las primeras horas de la mañana y al finalizar la tarde.

Si bien los meses de mayor riesgo son febrero, marzo y abril, ya que confluyen los picos de calor y de lluvias, a partir de diciembre comienzan a multiplicarse las larvas del mosquito en charcos y todo tipo de recipientes capaces de colectar agua.

Entre todos, unidos y organizados, juntos, o como sea, dejemos el celular un par de horas y salgamos a limpiar patios, tirar el agua de los floreros y tirar los cacharos. Pongamos un día y un horario. Proponemos, jueves y viernes de 14 a 15 horas. Es tarea de todos, que no caiga la fe, que no caiga la esperanza, que el dengue no nos venza.

 

No pactemos con la adversidad. No pactemos con el aedes  aegypti que vino para enfermarnos.

No esperemos sentado en la vereda de nuestras casas a los fumigadores y que pase la camioneta de Desarrollo Humano.

 Basta de quejarnos, alarmanos y buscar culpables. Vayamos a las acciones, la Vírgen del Carmen y Gauchito Gil no nos van a ayudar sin esperamos todo de brazos cruzados.

 

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Juan Coco

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