«A raíz de un accidente de tránsito protagonizado por mi hijo, concurrí al lugar y me presenté ante la oficial que estaba a cargo del procedimiento policial, en mi carácter de abogado» comenzó explicando a NF el abogado Pablo Rodolfo Miño.
Contó que «en el lugar (donde ocurrió un accidente de tránsito) me dirijo a mi hijo y, luego a los muchachos que estaban en el otro vehículo. Ninguno de estos estaban lastimados ni presentaban ninguna lesión» explicó sobre los hechos sucedidos en la mañana del domingo.
«Entonces» prosigue «le pedí, a la oficial de policía que estaba a cargo del operativo, un médico para examine el estado de mi hijo; quién me había manifestado que le dolía la cabeza por el golpe. Ante este planteo, «la oficial me dijo que estaban esperando un móvil para llevarlo a la Tercera. Le dije que use uno de los móviles policiales presentes y me dijo que no» añadió al detallar los sucesos.
Ante esa negativa, «le dije que lo iba a llevar a que lo revise un médico en mi vehículo particular y se volvió a negar. Por último, ante mi insistencia, la oficial a cargo del operativo me manifestó que podría ir en mi vehículo particular, con un uniformado, pero únicamente hasta la comisaría. Yo le dije que lo urgente, al no estar en presencia de ningún delito penal era la asistencia médica antes que llevarlo a la comisaría y que si ella no disponía su traslado yo lo iba a llevar a un centro asistencial para hacerlo examinar» continuó relatando Miño.
«A todo esto, mi hijo continuaba sentado en la vereda rodeado de tres uniformados. Ante la reiterada negativa a la asistencia médica, le dije a mi hijo que se incorporara para llevarlo yo mismo a un centro asistencial, acción que fue respondida por la oficial a cargo del operativo ordenando mi inmediata detención y traslado a la Comisaría Tercera».
«Yo manifesté que estaba ejerciendo mi profesión y que en esa condición me debía dar el mismo trato que a un magistrado, por imperio de la legislación vigente y debía abstenerse de obstruir mis funciones».
«Desoyendo mi planteo, dio la orden e, inmediatamente fui esposado, incomunicado y trasladado a la Comisaría Tercera, del Barrio San Miguel».
El letrado, explicó que «para proceder a mi traslado si dispuso del móvil que no quiso disponer para trasladar a mi hijo a un centro asistencial. Según manifestaciones de la propia oficial “porque ese era el procedimiento”.
Continuando con la exposición, Pablo Miño nos cuenta que «una vez en la Comisaría fui entrevistado por un par de oficiales de Policía, a quienes manifesté mi condición de abogado y les hice saber que estaban obstruyendo el ejercicio de mi profesión y violando el art. 58 de CPCC. Ninguno de ellos, incluido el Comisario Verón, Jefe de la citada Comisaría, hicieron lugar a mi pedido. No sólo eso sino que me mantuvieron esposado e incomunicado durante aproximadamente dos horas hasta que se hizo presente un oficial mayor, quien se presentó como inspector de la UR I, quien ordenó que me quiten las esposas y me permitió llamar un abogado«.
LA NOTA PRESENTADA HOY AL CONCEJO PROFESIONAL DE LA ABOGACÍA
«Lo grave» de acuerdo a la versión del letrado «es que desconocieron el hecho de que yo me hice presente a ejercer mi profesión. A los policías eso le importó nada. No usaron el móvil policial para llevar a mi hijo a un centro asistencial no quisieron pedir una ambulancia».
Pero «para detenerme, inmediatamente utilizaron el móvil policial. Cómo si se burlaran del profesional. Por suerte, a mi hijo no le sucedió nada. Fue examinado por el forense policial, casi tres horas después del accidente. Porque ese era “el procedimiento”.
LA VERSIÓN DE LA POLICÍA
«Un conductor alcoholizado colisionó violentamente un automóvil estacionado»
El hecho se registró a las 7 de la mañana de este domingo, cuando efectivos de la Comisaría Seccional Tercera acudieron a verificar un requerimiento por una colisión de vehículos en la avenida Sargento Cabral y calle José María Cabezón de esta ciudad capital.En el sitio, observaron que la colisión se produjo entre una Renault Kangoo y un Volkswagen Gol estacionado, sufriendo ambos daños materiales.
Los efectivos identificaron al conductor del Gol, quien refirió que al momento estaba con otra persona, estacionado sobre la avenida Sargento Cabral. Por causas que se tratan de establecer fue embestido violentamente desde atrás por el conductor de una Renault Kangoo, que según comentó ya venía zigzagueando.
Se le requirió a ambos conductores las documentaciones de sus respectivos rodados, advirtiendo que el hombre de 26 años que conducía la Kangoo tenía aliento etílico.
En ese momento se presentó en el lugar un hombre de 56 años que se identificó como abogado y padre del joven que conducía la Kangoo, manifestando que iba a llevar a su hijo, que él lo iba hacer examinar y que no se haga nada.
Ante esa situación, se invitó al abogado (padre del infractor) a que acompañe a su hijo hasta la dependencia policial a los fines contravencionales, se negó y opuso resistencia al procedimiento ostentando el título habilitante de la profesión que ejerce pretendiendo entorpecer el accionar policial, situación que motivó su detención.
El abogado, el infractor y el propietario del vehículo dañado, fueron trasladados a la Comisaría jurisdiccional, procediéndose además al secuestro de ambos rodados a los fines periciales.
En la Comisaría se le realizó la prueba de alcoholemia al infractor, arrojando 1,25 g/l de alcohol en sangre. Posteriormente se le notificó situación legal y una vez desaparecida las causales que motivaron su detención continuó en libertad.
El progenitor continuó con sus reclamos en la unidad operativa, con quien se dialogó y se le pidió que colabore con los trámites. Lo sucedido se informó a la Jueza de Instrucción y Correccional en turno, Dra. Laura Karina Paz, quien dispuso que se sustancie causa por resistencia a la autoridad, que se le notifique situación procesal y continúe en libertad, situación que se realizó conforme lo ordenado por el magistrado.