No es el deporte. No es el Rugby. No es el alcohol

No es el deporte. No es el Rugby. No es el box. No es el alcohol. No son las drogas. No son las malas compañías. No es… No son… 


Es. Es el NO, no dicho a tiempo. Es el celular a los 8 años. Las redes sociales sin control a los 11.

Es la «previa» consentida en la casa. Es no preguntar qué pasó o festejar el primer golpe con el que apareció después de una larga noche.

Es el cuestionamiento a las decisiones de la entidad educativa antes de averiguar los motivos. Es ayudarlo como sea para «pertenecer».

Es las veces que no te levantaste a la noche para ver cómo volvió. Es la mesa familiar no compartida.

Son las veces que transgrediste una norma y festejaste adelante de tu hijo haciéndolo cómplice. Es el adulto que se cree pendex. Es el niño que se le permite ser más grande de lo que es. Es la tablet en vez de juguete.

Es el celular para que no moleste mientras comemos.

Es la sociedad que está cabeza para abajo. La autoridad que no actúa. La norma por más simple que sea que no se cumple. Los premios y castigos trastocados.

Es el que hoy se pronuncia en contra de la violencia y no se da cuenta las veces que fue violento con sus palabras y comentarios.

Es el que no se da cuenta que a veces es mejor callar. Es el que no se da cuenta que a veces es mejor retirarse ..y quedar como tonto, que luchar contra los molinos de viento.

Son ellos. Somos nosotros. Soy yo…

Extraído de Marcela Barbosa.

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