ESCRIBE: Concejal Miguel Montoya
Hace 15 días, los Concejales de la Ciudad de Formosa estamos tratando de ponernos de acuerdo para nombrar nuestras autoridades y dar inicio al año legislativo ordinario en el Concejo Deliberante, en el medio fue TODO ANORMAL.
Una nueva composición del cuerpo producto de una escinción dentro del bloque oficialista, determinó que existen 6 concejales oficialistas y 6 concejales opositores. Para elegir autoridades, siempre, acá y en todos los órganos legislativos de los 3 niveles de gobierno (Nacional, Provincial y Municipal), se tiene en cuenta la proporcionalidad de los miembros.
Creo que nadie podría discutir la virtud que tiene respetar la presidencia del cuerpo en cabeza del oficialismo: hace al impulso de las políticas que quiere implementar el Intendente, respeta la línea sucesoria ante una ausencia del mismo y, en este escenario de paridad, le da el voto doble para insistir con alguna medida que por discutida que fuera, no obstante el gobierno municipal la quiere llevar adelante.
Tampoco parece que alguien pueda entender que la Vicepresidencia no le corresponda a la 1era minoría. Ya el año pasado cuando la composición oficialismo/oposición era de 7 a 5 solicitamos ese espacio. Nos lo denegaron sin otros argumentos más que votar e imponer una mayoría circunstancial.
Pero este año, que la integración señala paridad de 6/6 entre oficialistas y opositores, no parece necesario hacer un esfuerzo intelectual muy grande para concluir que nuestra posición es RAZONABLE.
Está rigidez en las posiciones, creó estos 15 días de anormalidad circense, declaraciones cruzadas casi adolescentes, sesiones fracasadas por falta de quórum, la utilización de empleados que supuestamente no cobrarían sus sueldos si no se destrababa el problema, etc.
Así como cuando comienza un mundial de fútbol y somos todos directores técnicos, hace 2 semanas somos todos constitucionalistas parlamentarios interpretando Constitución, Ley y Reglamento Interno para elucubrar finales posibles; y para finalizar el 1 de Marzo el Intendente dando su discurso de “apertura de año legislativo” en la calle frente al Concejo Deliberante, pero deliberadamente afuera, no adentro. TODO MUY ANORMAL.
Se pueden “ganar” pequeñas batallas discursivas mediáticas, pero si la Politica no se pone de acuerdo ni para arrancar, PERDEMOS TODOS.
Sigo creyendo que la Política es una herramienta fantástica para discutir posiciones y buscar consensos, es nuestra OBLIGACIÓN encontrarlos. Nuestra ciudad tiene muchos problemas de los que tenemos que ocuparnos entre todos, y si las propuestas para destrabar la falta de autoridades en el Concejo se tardaron no es excusa para no trabajarlas y llegar a una acuerdo que nos represente a todos.