El conflicto comenzó el fin de semana. La madre de una menor (Maylen, una nena de 3 años con síndrome de Down) «se metió» en una vivienda del IPV que los vecinos aseguran fue asignada a un concejal. Llegó la orden de desalojo «pero no se animaron, hasta ahora». A media tarde, en medio de mucha tensión.
En esta madrugada «hay siete casas tomadas», pero los uniformados «sacaron a los palos a un señor viudo y lo llevó a la comisaría en la patrulla. Había menores pero nos importó nada; hasta los colchones viejos le tiraron. A las viviendas nuevas, le entregan a gente que no necesita».
Después de la medianoche, frente a las casas se juntaron varias familias para «defender el lugar de la violencia y un techo digno que nos merecemos los pobres de verdad» manifestaron. LA POLICÍA RODEA EL LUGAR CON PERSONAL ANTIMOTINES.
El malestar de los pobladores de El Espinillo es «porque solo le dieron casas a allegados al intendente Martín Sotelo, entre las que se encuentra la concejal Lula Galeano».
