#ComunicaciónEnTiemposDePolítica
La desinformación, también llamada manipulación informativa o manipulación mediática, es la acción y efecto de procurar en los sujetos el desconocimiento o ignorancia y evitar la circulación o divulgación del conocimiento de datos, argumentos, noticias o información que no sea favorable a quien desea desinformar.
Hay muchas historias de gobiernos que apostaron a la desinformación. Y de esta no se salva casi nadie. Pero, en estos tiempos, la información fluye de un celular. Allí, los gobiernos que pretenden imponer la agenda de la opinión pública, juegan en minoría. Las redes sociales ingresaron a la vida de adolescentes, jóvenes y hasta de los abuelos. Con ello, ganaron la independencia de buscar la información que quieran, cuando quieran y -encima- opinar».
Todo influye. La evolución de la sociedad le saca varios pasos de ventaja a la clase política: los que se instalan en las esquinas para informar “dónde vota” quedó relegado por una aplicación de smartphone. El marketing político también pasa por un «aparatito» que también sirve para llamar por TE. Basta pararse dos minutos en la esquina de Rivadavia y 25 de Mayo, y mirar a su alrededor para hacer una rápida encuesta: cuántos formoseños tienen un diario papel en la mano y cuántos tienen o van mirando un celular?
Por la información masiva, se quebró la «transferencia de voto e ideología», surgido de las sugerencias de los padres a jóvenes votantes. Los «pibes» saben todooo….
Las inversiones en remises que llevaban a los votantes, acompañado de un militante, en los momentos previos a colocar el voto en la urna; fue reemplazada -en buena parte de Formosa- por las motocicletas que le otorgan «libertad» al ciudadano.
Los medios que más captan audiencia en la ciudad tienen una activa «plataforma de redes». Saben que el que no escucha la opinión de la gente, cae en audiencia. Quizás ello explica que la mayoría de los medios ligados al oficialismo provincial no emiten llamados telefónicos al aire de oyentes, no tienen o leen comentarios de sus cuentas de facebook, o no tienen interactividad masiva. Entonces, esquivar el debate y la conversación «quedan afuera» del rating importante. Es muy distinta la opinión publicada, de la opinión pública.
EFECTOS
En nuestra ciudad, en las últimas semanas, se viralizó el video de un cura de Ibarreta, el cartel del ex policía a favor de Macri en el interior, y el famoso «globo» en manos de una niña en la Costanera. Todo se metió de lleno en la campaña electoral de las PASO y pretende imponerse unos días más. También vale traer a colación un detalle proselitista: las pintadas que asociaban a Naidenoff y Hernández con el «ambre» (sin hache) con el objetivo (logrado) de llamar la atención, tuvieron en la opinión púbica una reacción adversa. Por eso, este viernes fueron «tapadas» por carteles del gildismo.
