El intendente de Laguna Yema, Luis Alberto Corvalán, en la demorada apertura de sesiones del Concejo Deliberante realizada este martes, reconoció que se le complicaba conseguir trabajadores «para una cooperativa, que debían ser blanqueados» mediante un monotributo porque «la mayoría» tiene planes sociales como «pensiones por invalidez que no sé como la conseguían» o Asignación Familiar por Hijo (AUH).
Buscaban personal para realizar obras con fondos asignados por el estado provincial que los obligaba a «contratar mano de obra desocupada» y tener la contratación bajo las normas de la ley.
El jefe comunal, que debió ser intimado por los concejales Ariel Gallardo y Daniel Atanasio para que inaugure el período legislativo municipal y rinda cuentas de las acciones del año pasado, también admitió que «como en la mayoría de la municipalidades de la provincia», hay empleados en ne negro «que no quieren ser blanqueados para no perder su asignación nacional» y los comprende, «porque la asignación de Nación es dos o tres mayor que la que otorgan» en los municipios.
Corvalán dijo que bajo su cargo «hay unos 190 empleados», pero solo 120 están «legales». Por ello surgió un inconveniente cuando llegaron fondos del estado provincial para «pagar los 2 mil pesos de bono de fin de año». El subsecretario de Economía «(Daniel) Antinori nos envió 240 mil pesos nada más, porque se basó en la cantidad de agentes registrados», el resto debieron completar con fondos propios «aunque para eso debimos dejar de pagar algunas cuentas a proveedores» afirmó.
