La polémica por la denuncia sobre narcotráfico, que involucra al poder político de Formosa y que alcanzó su punto más agudo cuando el senador nacional de Cambiemos Luis Naidenoff dijo que esa provincia es «un narcoestado», se trasladó hoy al Senado de la Nación, donde senadores del oficialismo y de la oposición cruzaron acusaciones y reproches en el inicio de la sesión ordinaria.
El fuego cruzado se abrió cuando el senador por Formosa, Naidenoff, planteó una cuestión de privilegio después de que, esta semana, la Legislatura provincial repudiara sus dichos y el legislador denunció que fue censurado en un canal de TV provincial por hablar del familiar del gobernador detenido con marihuana.
En el inicio de la sesión, Naidenoff declaró que «esta es la consecuencia de denunciar la complicidad con el narcotráfico en Formosa» y afirmó que «cuando hay funcionarios vinculados al negocio de la droga no hay términos medios: o la sanción o la complicidad».
Naidenoff denunció también complicidades del poder político y judicial con el tráfico de drogas, y aludió al actual gobernador del extracción peronista, Gildo Insfrán, lo que motivó la intervención de los senadores que le responden al mandatario José Mayans y Graciela De la Rosa.
«Estamos cansados de que se agravie gratuitamente a los formoseños», expresó De la Rosa, mientras que su par Mayans acusó al radical de pretender «dañar la imagen del gobernador» y atribuyó las intenciones de las acusaciones a motivaciones políticas. «No hace falta estar manchando a personas honorables para ganar un voto más, no se puede hacer eso», sostuvo el senador del PJ por Formosa.
La semana pasada, el Consejo Nacional del Partido Justicialista emitió un comunicado de respaldo de Insfrán, tras ser salpicado en el escándalo por la detención del esposo de una sobrina suya, Jabier Avalos, dueño de un camión en el que hallaron 2.500 kilos de marihuana camuflados en una carga de zapallitos.
