#Frío / Hay pies descalzos a los que no les llegó ni “la fé, ni la esperanza” y no pueden esperar el segundo semestre

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El frío es más rudo… cuando no haya calzados.

Las bajas temperaturas de estos días en “La Hermosa” golpea fuerte en los sectores más débiles, como siempre. Es aquí donde se desnudan las realidades que no se pueden esconder debajo de la alfombra ni con slogan de campaña.

Los pies descalzos de varios pibes del barrio San Antonio, movieron el sábado a varias familias a llevar un poco de ayuda para mitigar estas noches.

Cubiertos a medias por paredes y techo de cartón, “los hermanitos duermen abrazados, por el frio” contó la madre a un periodista. El calor de esos cuerpos alimentados con “el cocido con pan de la noche anterior” pega fuerte en el corazón de cualquiera.

Son familias carenciadas. Inclusive de sueños y objetivos. Viven el día a día. No saben de neoliberalismo, la cotización del dólar, ni las subas y bajas del sistema bursátil.

NO SON JUGUETES. Los pibes felices con colchas que abrigarán sus frías noches!!

Por “los huecos” de los cartones y viejos banner de campañas políticas entra “un frio que hace tiritar”, nada más que eso.

No se alimentan “con fe y esperanza” ni el anunciado cambio de expectativas “del segundo semestre”.

Hay pies descalzos. Hay pobreza, y no tan lejos. Cuando cae la noche alcanza a verse como vislumbran las luces del “maiminesco” paseo costanero, se contrapone con la llama de una vela, porque tampoco llega la luz eléctrica.

Están al costado de lo que tiempo atrás fue “un obrador de la empresa que iba a reparar las vías del tren”. Si del Ramal C25, el que tiene un cartel en la Costanera, ese, si ese.

Allí, el sol (el abrigo de los pobres) es tan esperado como un plato de comida.

Pensará que lo descubrimos ahora?. Noooo, es historia vieja!!!! Pero en estas noches de temperaturas de 2 o 3 grados, las sensaciones son diferentes.

EL PUEBLO AYUDA AL PUEBLO

Como siempre. La solidaridad formoseña no falló: las zapatillas comenzaron a llegar.

Es tiempo de todos los formoseños. Hoy o cualquiera de estos días, usted que tiene un poco más que la media, suba a sus hijos al coche o la 4×4 busque algún abrigo o alimentos y salga a recorrer las calles de tierra de barrios que hace mucho no visita. Baje, deje la ayuda, mire a los ojos de sus hermanos y escúchelo un rato.

No saque fotos para el Facebook. Que el silencio haga lo demás: que la mano derecha no se entere lo que hizo la izquierda. Habrá hecho un bien a los ojos de sus hijos y su corazón.

LOS PIES ABRIGADOS

Mientras tanto, en otros ámbitos y sobre alfombras, la clase política estará discutiendo sobre posicionamientos para las elecciones del año pasado. Estarán viendo el comportamiento del ocasional adversario electoral (sutil expresión utilizada para reemplazar la palabra enemigo) y “en nombre de la democracia” volverán con esperanzadoras frases de campaña que “tiran la pelota para adelante” de los problemas urgentes.

Ni Macri, ni Gildo ni Jofré van a sufrir frio esta noche. Tampoco la mayoría de sus funcionarios. No espere recetas mágicas ni busque culpables. Deje sus broncas y salga a buscar ayuda para los pibes inocentes “de patas sucias” y mirada profunda. La recompensa la va a sentir a flor de piel.

No sienta miedo ni vergüenza. Si alguna vez sintió hambre y frío lo va a entender. Si nunca le faltó una colcha y la heladera siempre estuvo llena; va a valorar lo que siempre le sobró.

El pueblo ayudará al pueblo, como siempre.

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