Se trata, sin dudas, de una decisión del mandamás. Gildo Insfrán optó por bombardear a la opinión pública con inauguraciones y anuncios de obras faraónicas y con discursos que no salieron a buscar la reacción del adversario electoral.
Un cambio de estrategia llamativo considerando que tiene todos los elementos para “invadir” la provincia con gigantografías para centrar la campaña en su figura. Ni siquiera se escucha un jingle promocionando su candidatura.
Empero, optó por llamados a licitación de obras públicas millonarias. Después de muchos años, la sociedad sabe que van a concretar.
Lustros atrás, los candidatos subían las apuestas de promesas. En estos tiempos, Insfrán marcó un hito: no promete, llama a licitación o corta la cinta.
A tal punto se ha naturalizado la obra pública en Formosa, que dejó de ser «la gran noticia» la entrega de llaves a casi 500 nuevos propietarios en el barrio Nueva Formosa.
Mucho se extrañará a Cristina desde el 11 de diciembre. Comenzará la etapa de «barajar y dar de nuevo».
Es una coyuntura que será difícil de igualar. Los miles de millones que destinó el matrimonio Kirchner para obras en Formosa es inimaginable. “La vara está muy alta” dicen los entendidos en rating de TV. Cuando pensábamos que Insfrán pasaría a la historia con la autovía, sorprendió con el acueducto.
Pero antes de firmar un acuerdo delante de las cámaras de TV, la “previa” se centra en Buenos Aires. En los pasillos de la Casa Rosada; dónde también hay que esperar sentados extensas horas a los funcionarios de primera y segunda línea. Allí, Insfrán conoce “de memoria” todos los vericuetos y tiene a Julio De Vido como partícipe en la tramitación de beneficios para Formosa.
LA LUCHA CAPITAL
Aquí, donde el río Paraguay “hace curva”, la lucha por el voto capital todo se convirtió en un ajedrez político electoral. A De Vido “le salió” un candidato del mismo partido con fuerte promoción publicitaria.
La sociedad percibe que “Gildo permite” el pregonado cambio que reclama un sector de la sociedad. Aunque con otro escenario, “16 años atrás la ciudad votó a un opositor” buscando “el cambio”.
Hoy, “la posibilidad de cambio” lo tienen dentro del mismo peronismo. “Es decir que los peronistas que votaron y permitieron el triunfo de Gabriel Hernández en el 99, ahora pueden cambiar sin sacar los pies del plato” explica un “ingeniero electoral”.
Pero la principal traba que tiene Nando De Vido en la campaña “es que no puede salir a criticar al compañero!!!”.
Quizás por ello, como nunca, los ejes de campaña son los proyectos!!!. Enhorabuena!!!.
Y metido en todo ese contexto, en silencio Buryaile “hace su juego” mostrándose como alternativa de la interna gildista. “Tenemos una encuesta que, mano a mano, nos da ganador” dijo en QTH Radio.
No quiso ampliar más, “porque en la semana los encuestadores la darán a conocer” agregó el hombre que va en las boletas de Macri, Massa y Stolbizer.
Se anticipa una buena elección de Massa, similar a las PASO dónde salió segundo, y un lote de indecisos del 16 por ciento que inclinarán la balanza decidiendo quién será el intendente electo.
Al día de hoy, en la ciudad de Formosa, el “poder” está en manos del elector. Ninguno puede mostrarse ganador. Nada está definido.
Es un guiño para la democracia. No hay tendencia definida. Y eso le agrega un plus a las urnas que se habilitarán a las 8 de mañana del 25 de octubre.
Mientras tanto, la mayoría de los candidatos se dedicarán a hacer campaña por redes sociales hasta el 25 de octubre a las 6 de la tarde.