El senador nacional cordobés, Luis Juez, ex intendente de la ciudad mediterránea -donde está instalada Dioxitek-, manifestó en la apertura de la Audiencia Pública, que él como jefe comunal tuvo que padecerla, soportarla y que se cansó de enterrar gente amiga, conocidos y muchos vecinos que murieron de cáncer inexplicables, y que es mucha la gente que hoy padece cáncer de piel culpa de una fabrica que ellos nunca eligieron tenerla en su tierra.
En ese sentido agregó que la fábrica «dejó un pasivo ambiental de 59.600 toneladas de cola de uranio». Afirmó que «las vidas que debemos preservar son más importante que 100 puestos de trabajo». Juez habló en el marco de la audiencia ciudadana «Los derechos humanos y la contaminación ambiental. Caso Dioxitek».
«Aprovechen esta oportunidad, no permitan que las autoridades se cierren al debate y es importante no se dejen vender espejos de colores, ya que ninguna cantidad de puestos de trabajo y les digo la Dioxitek a instalar en Formosa tiene más tecnología que la de Córdoba que en el máximo genero 100 puestos de laburo, pero la vida suya, de su nieto, creo que vale un debate y las vidas que debemos preservar son más importante que 100 puestos de trabajo» señaló el parlamentario cordobés.
Por ultimo dijo: «Probablemente el pueblo de Formosa este iniciando un camino que en el país no existe, ya cada vez que se quiere discutir una cuestión que tiene relación con el medioambiente alguno dirigente político que fue electo solamente en un reunión de gabinete se decida cosas que involucra la vida de millones de argentinos, bienvenido el debate y creo que van a sentar un precedente en la Argentina».
Los organizadores del evento realizado en salón La Cascada, estimaron que asistieron «más de 700 personas que llegaron por propia voluntad y por sus propios medios». El encuentro, organizado por el senador formoseño Naidenoff, estuvo acompañado de su pares Luis Juez, Norma Marandini (DDHH Córdoba), Roberto Basualdo.
También asistió el padre Canesín; se recibió la adhesión escrita del diputado nacional Juan Carlos Diaz Roig y de los legisladores nacionales del FpV, Luis Basterra y Carlos Donkin, quienes resaltaron la trascendencia del encuentro y se lamentaron de no poder participar por razones «ajenas a su voluntad».
Entre la concurrencia pudo verse senadores, diputados, concejales, docentes universitarios, técnicos y ecologistas del Paraguay, y a la totalidad de la mesa coordinadora antinuclear de la localidad de Pilar (Paraguay), como también de las provincias de Chaco y Corrientes.
Luego de las palabras de bienvenida del senador Naidenoff, presidente de la Comisión de Derechos y Garantías del H. Senado de la Nación y de que hicieran uso de la palabra los restantes senadores nacionales que participaron del encuentro, se dio apertura al trabajo de comisión con la exposición del biólogo Raúl Montenegro, Presidente de Fundación para la Defensa del Ambiente (FUNAM), que se explayó sobre «los nefastos antecedentes» de Dioxitek en Córdoba.
Seguidamente hicieron uso de la palabra el Dr. Juan Picolotti, Constitucionalista y Asesor Legal de CEDHA (Centro de Derechos Humanos y Ambiente), la Dra. Soledad Sede, representante de Greenpeace, la Dra. Gretel Schaj, representante de Los Verdes y al Dr. Juan Schroeder, Presidente de Red Emergencias Ambientales, entre otros referentes ecologistas.
MORANDINI
A su tiempo, la senadora Norma Morandini dijo estar «muy contenta de estar aquí, ya que cuando la comisión sale le da mayor sentido a lo que hacemos como representantes, ya que hablar de derechos y garantías es hablar de Derechos Humanos y a veces perdemos de vista que en nuestro país lo que es realmente progresista es nuestra Constitución Nacional, reformada en 1994, que ha incorporado tratados internacionales».
NAIDENOF AGRADECIÓ AL OBISPO CONEJERO
En la apertura el senador Naidenoff agradeció «al Vicario de la Diócesis de Formosa y por su intermedio al Obispo quien públicamente se ha expedido sobre la necesidad de profundizar el debate y garantizar un ambiente sano y sustentable, además avanzar en que sean los propios vecinos quienes decidan a través de una consulta popular vinculante la decisión de la instalación o no de la planta de dióxido de uranio».
Fuente: diario Opinión Ciudadana
