CONMOCIÓN CIUDADANA. Falleció la mujer que estaba internada grave luego de la práctica de una cirugía estética.
El mediodía del miércoles se mostraba plomizo y desapacible pero de pronto esas sensaciones fueron como profundizándose en los corazones de cientos de hombres y mujeres, que no podían comprender lo que estaba sucediendo, hasta se advertía que los gorriones dejaban de gorjear y otros pájaros de cantar, las palomas estaban como embelesadas mirando al cielo, era que un ángel silenciosa y sutilmente estaba partiendo para velar por nosotros desde el reino de los cielos.
El Dios padre todo poderos la había convocado a su reino, quería alguien especial, inteligente, solidaria, honesta, buena hija, excelente madre y mejor hermana por eso la eligió a «Yoli» Corbalán.
Y ahí partió promediando la mañana al dominio de esos cielos. Su partida conmocionó a toda la familia policial, falleció no la Comisario Corbalán, se fue la oficial respetuosa de sus superiores y solidaria con sus subalternos.
La comunidad educativa del colegio Santa Isabel no salía de su asombro, nos dejó «Yoli» La mamá de «Eugue», la que siempre estaba, la que ayudaba y colaboraba como la que más.
Los colegas odontólogos tomaban conciencia de a poco, que perdieron a una profesional de excelencia, que se las arreglaba para tener tiempo y recursos para cursar pos grados y estar siempre a la vanguardia de todos los adelantos científicos.
Pero «yoli» era eso y mucho mas, era la silenciosa vecina de un barrio humilde que montó un consultorio odontológico que atendía gratis todas las semanas a los más necesitados, sin ruidos ni reclamos.
Fue la hermana ejemplar que acompaño en momentos difíciles a sus fraternos y por sobre todo la hija virtuosa de una familia orgullo de la sociedad formoseña, ejemplo de honestidad y hombría de bien, la formada por Cristian Corbalán y su entrañable esposa.
Hoy a todos los que queríamos a Yolanda Corbalán nos queda la resignación de saber que no tiene ni puede tener otra morada que es la celestial, su paso por esta vida terrenal fue un ejemplo de haberla sabido honrar con humildad y entereza, no la transcurrió, de ninguna manera, dejo su impronta para los tiempos.
Mucha armonía y resignación para esta familia maravillosa que supiste cimentar, son los deseos de toda una comunidad que te va a extrañar y mucho.
«YOLI» querida, nada le debes a la vida, descansa en paz. Fuente: Opinión Ciudadana y Facebook