La carta que la madre de Juampi Ayala quiso entregarle al gobernador

Sr. Gobernador Gildo Insfrán: En memoria de mi amado hijo Juan Pablo Ayala, (Juampi) y antes la imposibilidad de tener un acercamiento personal con usted, ni con nadie de su gobierno, aprovecho el presente para dirigirme a Uds, al Juez, el fiscal, los Ministros y a la toda la comunidad.

 

Probablemente mi nombre no le diga nada, quizás porque no sea una persona conocida pero en la remota posibilidad, que haya leído o escuchado en los medios mi nombre o el de mi hijo, ha sido porque llevo casi un año, concretamente a partir del 3 de agosto del 2011, exigiendo públicamente JUSTICIA. 

Juan Pablo – MI JUAMPI tenía 18 años, falleció víctima de una mala praxis en una clínica privada. Han sido casi un años de no llorar por mi HIJO, No lo hice porque me han quitado ese derecho OBLIGANDOME a salir a la calle, a RECLAMAR por JUSTICIA y buscando la verdad.

Se podrá imaginar usted, lo que padecí todo este tiempo sin mi amoroso JUANPI, tratando a la vez de consolar a mis hijos por la ausencia eterna de su hermano.

Le cuento algo, todas las noches le pido a mi hijo que venga a mi sueño, no tiene idea de las cosas de las que le hablo. Tengo mucha bronca porque la clínica sigue existiendo y, luchar contra ellos, que deberían curar, contener y salvar vidas, y no culpar, injuriar a alguien que ya no está más para defenderse. 

Este último año ha sido indudablemente el más difícil de mi vida, creí haberlo vivido todo y no me dolía nada, eso creí. A pesar de todo seguiré con mi lucha para obtener JUSTICIA y que se conozca la verdad. JUANPI era un chico con proyectos, sueños, lleno de vida al servicio de Dios, como Scout, como alumno y en la Renovación Carismática Católica, daba y dejaba todo por sus amigos.

Hoy sufrimos su ausencia física, y la ausencia de su alegría, su amor, llantos, tristeza, sus payasadas, en mi vida y en la de sus hermanos, familia y amigos. Particularmente me siento tranquila orgullosa y segura de lo que era Juampi, de haberlo criado con la frente alta, sin jamás hacerle daño a nadie. ¿Por qué me arrancaron una parte de mi vida?, ¿Qué más tengo que hacer para poder dormir un poquito mas tranquila y que mi amado hijo descanse en paz?.

Doy gracias a Dios a la Virgen y a mi ángel Juampi que me tienen de pie. Agradezco su atención, solo pido justicia.

 

N/R: De acuerdo a medios periodísticos (El Comercial, Radio Uno, Diario Opinión) la misiva no llegó a manos del gobernador, porque personal de seguridad no lo permitió. La mujer tenía la intención de entregársela en manos al mandatario. En el forcejeo producido minutos después del acto del 9 de Julio, le rompieron una foto del pibe fallecido el año pasado.

 

 

Fuente: Diario Opinión Ciudadana

 

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