Hace más de un año llegué a la Colonia La Primavera y escuché, por primera vez, de boca de los originarios su postura sobre el conflicto que derivó en la muerte de dos formoseños en la zona del corte en la ruta nacional 86. Por aquel entonces ya se presumía que las posturas de las partes eran inflexibles….
En el lugar de los hechos, como corresponde a un trabajador de prensa (aunque muchas veces depende del medio al que pertenece)
…Y así ocurrió: un diálogo de sordos llevó a una protesta de 4 meses con unos que apostaban “a que se cansen” y otros que “con todo el tiempo del mundo a su favor” comenzaron a construir precarias casas en los campos en disputa.
Dos formoseños: un aborigen y un policía (casado, sin hijos, hermano de la locutora Beatriz Falcón) pagaron con sus vidas “los caprichos” de (también) formoseños que apostaron “fuerte” a demostrar quién era el más fuerte en una guerra de poder, medios e intransigencia.
Mucho se escribió, contó, opinó y “chismoseó” sobre lo ocurrido antes, durante y después de la trágica tarde-noche del martes 23.
En mi caso, la labor periodística que desarrollo me permitió estar varios días en el lugar de los hechos “mano a mano” con los protagonistas al costado de la ruta, en las oficinas públicas, con los policías, los jueces, medios nacionales, medios provinciales, en los ranchos de la colonia, el velorio, el cementerio, y con acceso a mucha información obtenida y documentación “off de record” de “ambos lados”.
Privilegiada situación que me permite arribar a varias conclusiones de los diferentes escenarios que se fueron mostrando y variando los ejes de discusión.
1) Probablemente, ninguno de las partes tenía intenciones de acordar a cambio de ceder una posición en el difícil tablero de ajedrez que se tramó desde el inicio del conflicto.
Sepelio del aborigen muerto. En un cementerio de la comunidad.
2) El punto medio para conciliar es casi inaudito; por el lado se basan en lo estrictamente legal (firmas ante escribano/títulos de propiedad/escritos legalizados), mientras que por el otro exhibne un reclamo/derecho centenario: “somos nativos, los dueños de la tierra”. Un cruce de caminos con difícil salida, lo legal y lo ancestral. Con un condimento adicional, posiciones muy cerradas.
3) Cuando el juez Mauriño decidió encabezar la comitiva que caminando por la ruta 86 iba en busca de notificar de una orden de desalojo sabía que, “al menos”, los aborígenes tenían dos armas reglamentarias (que le habrían robado en el procedimiento del mediodía).
También estaba al tanto el magistrado (de 38 años) del estado beligerante de los manifestantes que ay cumplían 4 meses en la ruta. En ese entorno, los policías estaban “felices” porque “por fin un juez nos acompaña.
Siempre envían la orden y ordenan por TE” comentó un oficial que participó del enfrentamiento mortal. El juez comentó que llegó a esa circunstancia porque “quería darle respaldo” al trámite judicial. Por lo bajo, sus colegas difieren sobre la opción adoptada.
4) Los recaudos para los uniformados (ver fotos) no estaba 100 por ciento resguardada: había policías sin chalecos antibalas y (al menos uno que lo tuvo: el oficial Falcón) no se vio efectivamente protegido “porque estaba vencido o no era antibalas” reconoció un auxiliar del juzgado interviniente.
Ahora, según el expediente 59.931 se licitará para personal policial chalecos antibalas por un total de 330 mil pesos. Serán protecciones tipo RB 2 (según reglamento del RENAR).
5) Muchos habitantes de La Primavera “viven bien” en relación a las expresiones de dirigentes o referentes que expresan opiniones desde muchos km. de distancia. Son decenas los que se movilizan en motocicletas o poseen Direct TV, lo que explica una condición (probablemente) de poseedor de tarjetas de crédito o débito; o titular de un recibo de sueldo.
Con acceso a la TV digital. Estar informados «abre mentes».
También se observan muchas casas “tipo PAIPPA” y servicio de energía eléctrica “con medidor”. Esta descripción no significa que “deben callarse o aceptar injusticias”. Se trata solo de una muestra de la realidad.
6) De acuerdo a los registros fotográficos a los que tuvo acceso NoticiasFormosa, y que forman parte del expediente, los aborígenes “disponían –a la vista- armas caseras” y con una de ellas hirieron de gravedad al oficial Bence.
Cuando comenzó el enfrentamiento, obtuvieron “las de fuego” guardadas “entre los pastos o en las precarias casas luego incendiadas”.
En principio, y de acuerdo a la secuencia fotográfica, el primero en morir fue el policía y la respuesta fue el aborigen abatido (el mismo que mató al uniformado). Desde el lugar de los hechos.
Juan Coco
Mail: noticiasformosa@hotmail.com