Ahora bien, en los últimos tiempos han aparecido verdaderos cuadros políticos en nuestra provincia, todos agrupados en distintas organizaciones, asociaciones, juventudes con distintos rótulos… y sigue la lista…
El mayor problema a futuro es que seguimos desunidos en cuanto a nuestra conciencia generacional, no en nuestra concepción de ideas. Tenemos que dejar de lado los celos y ponernos codo a codo para cuando nos toque seguir la posta, y esto va a ser muy difícil si no nos unimos del todo, dejar de ser “funcionales a …”, “hombres de …”, no debemos militar por un cargo o un sueldo, tenemos el don de la edad, nos queda mucho por delante y no debemos apresurarnos. Tenemos la obligación de unirnos, la obligación de seguir levantando nuestras banderas, la obligación de continuar todas las transformaciones, realizaciones y utopías que está realizando nuestro gobierno.
Como dijo Evita “Si el pueblo fuera feliz y la Patria grande, ser peronista sería un derecho. En nuestros días, ser peronista es un deber. Por eso soy peronista. Soy peronista por conciencia nacional, por procedencia popular, por convicción personal…”
De nuestros padres y abuelos heredamos la doctrina, filosofía y sentimiento del Peronismo, del peronismo nos nutrimos, en él nos formamos y militamos en pos de alcanzar la Felicidad del Pueblo y la Grandeza de la Patria, teniendo siempre a Dios y al amor al prójimo como nuestra guía.
La historia nos está poniendo a prueba, nos pone en un estado de conspiración permanente, una terrible operación en búsqueda de desestabilizar al gobierno, los medios jugando todas sus cartas, los que rifaron el país posicionándose en salvadores de la Patria… Todo un Dejá vú ante nuestros ojos.
Es por eso que debemos estar más unidos que nunca, esta lucha ya la perdimos en el ’55 y en el ’76 y no podemos permitir que esto se repita, que no nos confundan, no a nosotros, son los enemigos de siempre, los que fueron cómplices eternos. Cómplices del genocidio, cómplices del vaciamiento, artífices locales de la debacle cultural pergeñada en las usinas del liberalismo.
Ellos son los mismos, nosotros también. Y hay que tenerlo muy claro, no van por una u otra medida, van por todo, por el modelo, por vos y tus ideales, por tus sueños y proyectos. El peronismo molesta, incomoda, es un obstáculo permanente en la historia argentina, un estorbo permanente para los cipayos de siempre.
Y es justamente por todo esto que es nuestra obligación generacional el unirnos, todos nos conocemos, todos sabemos de nuestras capacidades, sólo está en nosotros.
Luis A. Sebriano (h)
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