La intención “preventiva” para el partido de voleibol Argentina-Serbia era interesante: separar al público por una butaca vacía de por medio, controlar los accesos con scanner corporales. Pero, ingresó más de la cantidad de espectadores establecido y, por lógica, no se pudo “separar” a la gente para evitar “amontonamientos”.
En la foto no se observa que lo anunciado se cumpliera (Foto: lector de NoticiasFormosa)
La «muchachada» del Hospital de Alta Complejidad, que antes de entrar al estadio “controlaban amablemente” a los asistentes para evitar que “alguien que tuviera fiebre sospechosa” llegue a las plateas; funcionó bien.
Muchos medios on line se hicieron eco de las medidas preventivas para el encuentro mundialista realizado en el Cincuentenario, pero en los hechos, no se concretó.
«SI LO VAMOS A HACER, LO VAMOS A HACER BIEN»…
Este tipos de anuncios mediáticos no deben tener «grises»: se anuncia y se cumple, o no se hace nada. Caso contrario se puede convertir en un boomerang. Varios medios nacionales estaban atentos a esta medida preventiva que, al final, pasó inadvertida.
UNA SOLA ENTRADA
Llamó la atención que solo se habilitara el acceso de la avenida Lelong, quedando cerrados los de Antártica Argentina y la calle Corrientes.
Ocurrió que muchos aficionados llegaron a las inmediaciones del Cincuentenario antes de las 8 de la noche y debieron soportar “hasta 40 minutos bajo la llovizna” antes de entrar al coloso del deporte formoseño. “Si verdaderamente querían hacer prevención contra la gripe hubieran evitado tanta exposición al frío y la llovizna de los espectadores” se quejó un asiduo asistente a los eventos de voleibol y básquet.
“Además, vimos como muchos acomodados/as no hacía colas, ni pagaban entrada. Acaso somos formoseños de segunda?” se preguntó la fuente.
“Para colmo” comentó “en las zonas VIP, dentro de la cancha, había mucha gente que no tenía nada que ver con el voley, ni la organización, ni la prensa. Vimos a hijos/as de periodistas que estaban mirando el partido y no trabajando como cronistas” se quejó.
Parte de razón tenía el hombre. El evento internacional tiene relieve que cruza las fronteras del Bermejo y del país. No se puede improvisar en detalles “salvables”.
La inversión económica del gobierno es muy elevada, si no se hacen las cosas bien, dejará de ser inversión para convertirse en gasto.