La conjunción del receso administrativo –que finalizó el pasado viernes– sumado a una serie de medidas de contención del gasto dejó a un número considerable de proveedores del gobierno de Gildo Insfrán con expedientes virtualmente paralizados por semanas.
Los más comprometidos son las empresas constructoras que aunque logran en esferas del Ministerio de Planificación y Obras Públicas que sus certificados sean aprobados, la plata no aparece.
“Tenemos ya varios certificados sin lograr que se paguen y eso nos complica en lo financiero”, señaló un empresario a cargo de una serie de construcción de viviendas enbarrios de la capital provincial.
La situación provocó que aquellos empresarios de la construcción que no tienen elrespaldo financiero propio para “aguantar” que salgan sus pagos, deban malvender sus certificados en el mercado financiero local en el que son aceptados pero con una tasa de interés que reduce sustancialmente la renta inicialmente calculada en la oferta que hicieron para que le adjudiquen la obra.
Misma suerte tienen los que proveen bienes y servicios de las más diversas actividades quienes no han visto un cheque oficial del Gobierno de Formosa desde hace un par de meses, cuando hasta mediados de diciembre pasado la fluidez de pago era algo común en la administración de Insfrán.
La preocupación en los pagos alertó a empresarios y comerciantes de Formosa que esperan que la situación se normalice a partir de la semana próxima y la pesada administración pública local se vuelva a poner en movimiento.
Fuente: Ámbito del Nea
